El Cristo de Corcovado, también llamado Cristo Redentor, es una impresionante estatua que preside la ciudad de Río de Janeiro desde su cerro más alto, el Morro do Corcovado, situado a 710 metros sobre el nivel del mar. Visita casi obligatoria para cualquier visitante a la Cidade Maravilhosa, existen muchas formas de llegar a él (os las contamos todas en un próximo post). Pero, sin duda, los mochileros de bajo presupuesto y viajeros intrépidos seguro elegirán la ruta senderista que les lleva hasta allí por libre. En este artículo os explicamos en detalle la ruta, cómo llegar, que llevar, los precios y os damos algunos consejos para llegar al Cristo Redentor de Corcovado.
ACTUALIZACIÓN, AGOSTO 2017: Durante las últimas semanas (julio de 2017) ha habido diversos asaltos a turistas en el sendero que conduce al Cristo Redentor de Corcovado. Antes de iniciar este sendero gratuito, ¡preguntar al guardia de la entrada por la situación!
Esta trilha, que discurre por dentro del Parque Nacional de Tijouca, es una corta pero exigente ruta con un importante desnivel acumulado para sus menos de 7 km. Además, las temperaturas de Río de Janeiro durante todo el año pueden ser una dificultad añadida. Pero si lo que se quiere es la forma más barata de llegar, la ruta a pie es sin duda la mejor elección. El sendero es gratis por lo que sólo habrá que pagar la entrada.
LA TRILHA
El sendero sale del Parque Lage, en el barrio Jardim Botânico. Este parque público merece unos minutos de paseo pues cuenta con bonitos jardines, alguna casacada y rincones encantadores. Hay que ir caminando hacia el extremo este, donde encontraremos una caseta con un guardia en la que hay que registrarse.

La Escuela de Artes Visuales, en el Parque Lage, y el Cristo Redentor de fondo
El primer tercio del camino es sencillo, ascendiendo un leve desnivel entre la hermosa floresta. Se debe cruzar tres veces el río, estando atentos porque salen pequeños senderitos que debemos evitar. Aunque el camino está bien marcado por huellas amarillas. Cuando llegamos a la tercera cascada, inicia la verdadera ascensión. Son casi dos km de un desnivel muy fuerte, que nos exigirá ir ayudándonos de los árboles, lianas e, incluso, poner las manos en el suelo en algunos tramos. Ir parando para recuperar el aliento e hidratarnos es importante. En un momento, en el final de la subida por sendero, hay una pequeña travesía de roca expuesta, asegurada por una cadena en la roca. No es complicada pero hay que estar atentos si la piedra está mojada.

¡De ahí abajo venimos!
Desde allí se llega a las vías del pequeño tren de Corcovado (una de las alternativas para subir). Hay que cruzarlas y continuar por el sendero hasta encontrarse con la carretera. Desde allí solamente seguirla unos 600 metros más hasta encontrar la entrada y las taquillas.
EL CRISTO DE CORCOVADO
Declarada una de las siete maravillas del mundo moderno, es un icono turístico mundial. Su construcción inició en Francia en 1926, encargada al escultor francés Paul Landowski, que llevaría después a Brasil en cientos de piezas para ser ensambladas allí. Es una obra maestra de ingeniería, arquitectura y escultura de la época. El escaso terreno en la cima del Corcovado, los fuertes vientos y la extensión de los brazos de la estatua supusieron grandes desafíos técnicos.
Desde sus diversos miradores se tienen las mejores vistas de la privilegiada Bahía de Río. Se pueden distinguir con mucha claridad los iconos más representativos de la ciudad: el Pan de Azúcar, las 5 playas más populares, el Jockey Club, la Laguna Rodrigo de Freitas, el estadio de Maracaná, el Sambódromo y, en días claros, la vecina ciudad de Niteroy. También se pueden apreciar algunas de las favelas de la ciudad (aquí os hablamos de cómo visitarlas por libre). Eso sí, el Cristo de Corcovado es visitado por más de dos millones de personas todos los años. Masificación está asegurada. Hay que ser paciente para poder tomar algunas fotos.

Los miradores del Santuario del Cristo Redentor siempre repletos
Datos curiosos sobre el Cristo de Corcovado:
- Pesa 1000 toneladas y mide 38 metros (8 de pedestal). Está hecha en piedra-jabón Estaba previsto que en su inauguración, en 1931, la iluminación fuera accionada por Marconi desde Nápoles (Italia) para celebrar la radiotransmisión a larga distancia. Las condiciones meteorológicas impidieron la hazaña.
- Es hueca por dentro. Sólo contiene una pequeña escalerita hacia las 4 salidas que tiene para su mantenimiento: una en cada brazo, una en el costado y otra en lo alto de la cabeza.
- El brazo izquierdo es 40 cm más pequeño que el derecho para ayudarla a soportar vientos de más de 150 km/h
- El Cristo de Corcovado es también un lugar de peregrinación para católicos de todo Brasil y otras partes del mundo.
PRECIOS
Como hemos comentado, la trilha de subida es gratis. Lo que nos ahorra los altos costos del tren o las vans y solamente tendremos que pagar la entrada al Santuario del Cristo Redentor.
- 12 R$ ($3,8) – Temporada baja
- 24 R$ ($7,6) – Temporada alta, fin de semana y feriados
- Gratis – Menores de 11 y brasileños o residentes mayores de 60
Las entradas se pueden comprar en las boleterías de entrada al parque sin problema.
CÓMO LLEGAR
Hay varias formas de llegar al Parque Lage. Si estás Copacabana o Ipanema, puedes tomar el bus 583 que rodea toda la Lagoa (3,8 R$ – $1,10). Otra opción es tomar el metro y bajar en la parada Botafogo (4,1 R$ – $1,3), desde allí, tomar el Ônibus Integração Botafogo/Gávea incluido en el precio.
QUÉ LLEVAR
Lo habitual para cualquier ruta de senderismo. Ropa cómoda, calzado de montaña, algo de comida (fruta, barritas energéticas, sándwiches y algún fruto seco) y mucho agua. El calor aprieta.
Puede ser buena idea también llevar algo para cambiarse después. Como podéis ver en la foto, ¡se suda la camiseta!
CONSEJOS MOCHILEROS
- Madrugar mucho siempre es un buen consejo para evitar aglomeraciones. Las horas centrales (11 a 15) son las más concurridas en el Cristo de Corcovado.
- Paciencia para las fotos, mucha. Aunque madrugues, aquello es la guerra. Tomar las fotos desde un lateral te puede ayudar.
- A la bajada, estar muy atento para tomar bien el sendero que sale desde la carretera. Nosotros nos pasamos y tuvimos que regresar, cuesta arriba. Por lo tanto, ¡mucho ojo!
- Disfrutar del parque en el regreso. Hay pequeños monos titís, muy fáciles de ver y un sinfín de otros animalillos.
- Al llegar de nuevo al Parque Lage, el Jardín Botánico queda a apenas 10 minutos de paseo. Es un paraíso de calma dentro del bullicio de Río de Janeiro y se pueden apreciar miles de especies de flora de todo el país. Nosotros incluso vimos un grupo de tucanes en las palmeras. ¡Sí, tucanes en la ciudad!
- Además del Jardín Botánico, se puede aprovechar para dar un paseo por orilla de la Lagoa de Rodrigo de Freitas.
5 comments
El enlace de la visita a las Favelas dice que se lo ha comido so «perro». Cuándo lo subís?
Tomado nota, difinitidamente son mi guía turistica. Gracias por compartir detalladamente su experiencia, seguro lo replicaré. Abrazos nos vemos en tu siguiente publicación 🙂
[…] Para nosotros, la mejor manera, ¡y la más barata! Se disfruta del Parque Nacional Tijuca, incluidos los adorables tití, unos pequeños monitos que es relativamente fácil cruzarse. Además, se hace ejercicio y se llega al Corcovado satisfecho por el esfuerzo realizado. En temporada baja pagaréis R$12 ($4) por la entrada al Santuario, en alta R$24 ($8). Podéis encontrar una detallada descripción del itinerario en nuestro artículo del Cristo Redentor de Corcovado. […]
Hola Peter, en enero vamos con mi novia y despues de leer tu relato nos dieron ganas de copiarles. Ahora te consulto…una vez arriba.es posible pagar para volver en Vans o Tren?
Hola Nicolás,
Disculpa la tardanza pero hemos tenido algunas semanas agitadas. La verdad es que nosotros bajamos caminando (que es mucho más llevadero y rápido que a la subida, por obvias razones) y lo recomendamos. Da tiempo a apreciar más el camino y disfrutar de la fauna, que a la subida ni la ves del esfuerzo, jejeje!
Pero, sí. La respuesta es que sí puedes conseguirte una van para bajar a la vuelta. Hay muchas que llevan grupos organizados, pero otras que van llegando y cargando gente. Al menos eso es lo que vimos nosotros en junio… Mucha suerte y si quieren algo, una parte de El Mundo en la Mochila está en Río. Avísennos cualquier cosa!
Un abrazo!