Hoy traemos al blog la que para nosotros es la ensalada perfecta. Una ensalada mochilera que se prepara muy fácilmente, es barata y aporta un alto valor nutricional. Nosotros nos la hemos preparado en lugares de medio mundo porque sus ingredientes, además, son muy fáciles de conseguir aunque estés perdido en un lugar remoto. Pero sobretodo, ¡está buenísima!
INGREDIENTES (para 2 personas)
1 lata grande de legumbres cocidas (garbanzo, frijol, lenteja…)
1 pimiento rojo
1 pimiento verde
1 tomate
1 lata de maíz cocido
1/2 cebolla pequeña
aceite de oliva
vinagre balsámico (o reducción de PX)
sal y pimienta
PREPARACIÓN DE LA ENSALADA MOCHILERA
- Empieza picando muy fina la cebolla.
- Corta en cuadraditos pequeños los pimientos y el tomate.
- Abre ambas latas, escúrrelas y pon las legumbres y el maíz en un tupper.
- Añade los pimientos y el tomate picados.
- Aliña con aceite, vinagre balsámico, sal y pimienta al gusto.
- Tapa el tupper y agita como si fuera una coctelera. Así emulsionarás el aliño.
- Listo, así de rápido. ¡Devora!

Ensalada mochilera en medio de los bosques del P.N. Plitvice (Croacia)
VALORES NUTRICIONALES
Legumbres: Son fuente de carbohidratos complejos, que se absorben más lentamente que los simples -como el azúcar-, y que junto a su alto contenido en vitaminas B1, B2, y B3 ayudan a la generación de energía a largo plazo. Son la mejor fuente de proteína vegetal y ácidos grasos insaturados, que aportan grasas saludables y previenen el colesterol alto. Además, contienen altas cantidades de fibra para mejorar el tránsito intestinal. ¡Las legumbres son lo más!
Tomate: Alto contenido en antioxidantes, que previenen el envejecimiento celular. Rico en fibra, vitaminas B, C, A y E y en minerales (potasio, fósforo y magnesio). Ayuda a hacer la digestión.
Pimiento: Destacan por su alto contenido en betacaroteno, como la zanahoria, que se transforma en vitamina A al entrar al organismo. Esto sirve para el crecimiento, el correcto funcionamiento del sistema inmunitario y la vista. Además tiene también vitaminas C, B6, B3, B2 y B1. También poseen, como el tomate, un alto contenido en antioxidantes.
Maíz: Alimento fundamental para medio mundo, el maíz es muy rico en vitaminas del grupo B, especialmente B1 y B3, como también en minerales como fósforo, potasio y magnesio. Alto contenido en grasas e hidratos de carbono. No contiene gluten por lo que sirve para las dietas de los celíacos.
Cebolla: Rica en fibra, minerales y oligoelementos, así como en vitaminas A, B, C, D y E. Favorece el crecimiento y refuerza las defensas orgánicas pues tiene propiedades bactericidas y funguicidas. Es diurética -ayuda a expulsar agua y electrolitos del cuerpo- y cardiotónica -mejora el ritmo cardíaco-.